domingo, 5 de abril de 2009

MIEDO AL DESPIDO

Para la mayoría de los ejecutivos, la pérdida del trabajo es el más aterrador de todos los eventos que puedan producirse. Pero dicen los expertos, que para llegar a ser "gurú" tienes que haber experimentado la pérdida de tu trabajo al menos una vez en tu vida profesional. Esa vivencia te hace madurar y ver las cosas desde otra perspectiva. Aquí no voy a hablar del después sino del antes, es decir, del miedo que tienen muchos ejecutivos a ser despedidos, sobre todo hoy en día.


Todo ejecutivo debe aceptar diariamente la posible pérdida de su trabajo, y debe hacerlo con valentía y con honestidad, tomando decisiones sin comportarse cobardemente por miedo a ser despedido. Para hacer mejor su trabajo y afrontar los desafíos que se plantean en su carrera no puede tener miedo; el miedo bloquea el razonamiento, provoca respuestas emocionalmente desmedidas, anula la claridad del pensamiento, limita la creatividad e inhibe el liderazgo. Restringe a los buenos ejecutivos...


¿Cómo podemos librarnos de ese miedo?

Lo primero que debemos hacer para librarnos del miedo, es asumir que estrés y miedo son dos nombres que definen el mismo sentimiento: la mayor parte del estrés se relaciona con el desempeño en el trabajo, lo que implica que lo que subyace es ese miedo a perderlo. Después, cambiar la relación que tenemos con aquellas cosas y eventos que causan nuestro miedo y hacer lo correcto más allá del miedo que se sienta.

Necesitamos actuar en base a una forma de pensar y hacerlo de manera correcta. El coraje se mide de acuerdo con el curso de la acción que uno toma ante la adversidad, y el secreto está en ACTUAR correctamente en base a un código ético y profesional. El miedo desaparece cuando estamos seguros de los apropiado de nuestras acciones.

Para tomar una decisión de negocios es necesario disponer de una tranquilidad mental que nos permita separar la decisión de sus consecuencias: algunas decisiones erradas resultan bien, y algunas acertadas resultan mal, ya que realmente no tenemos control sobre muchos factores decisivos. Es más, la vida es tan complicada que tener miedo de un resultado en particular es ignorar las inimaginables cadenas de eventos posibles en donde los errores dan paso a los éxitos, y los éxitos dan paso a los errores. Así que, sencillamente, HAZLO LO MEJOR QUE PUEDAS DE ACUERDO A TUS CREENCIAS Y ACEPTA LAS CONSECUENCIAS. Pase lo que pase, estará bien.