domingo, 25 de enero de 2009

PROFESIONALIZAR LA EMPRESA

En esta última semana hay dos noticias que confirman la situación que vivimos, pero no por ello dejan se sorprendernos: en el último año España ha generado 1.2 millones nuevos parados y afecta también a los empleados cualificados.


Sin dejar de lado el drama que hay detrás de estas cifras, esto puede ser una gran noticia para algunos empresarios: ahora tienen una puerta abierta para la profesionalización de la empresa. Ahora es el momento de "eliminar las grasas" cogidas en estos últimos años y contratar a profesionales cualificados que están deseando trabajar. Ahora es el momento de prescindir de aquellos empleados que siempre tienen una excusa o un "no" cada vez que se les pide algo, y sustituirlos por otros que aporten ilusión y entrega. Ahora es el momento de cambiar a aquellas personas que hipotecan el futuro de su empresa con tal de mantenerse pegado a su silla, por otras personas que busquen la supervivencia de la empresa.


El otro día me comentaron que un comercial de una empresa ofreció un contrato vitalicio a un cliente que consistía en una rebaja considerable de su tarifa actual (creca del 45%) más un incremento de esta tarifa 1,25% cada dos años (¡sin aplicar el incremento del IPC siquiera!) a cambio de seguir siendo cliente. Esto supone que, por lo menos hasta dentro de 20 años no recuperará los niveles actuales y una hipoteca de por vida de su empresa, pero a él le sirve para salvar su puesto. Mi pregunta es: ¿lo sabrá su jefe? Si no lo sabe, tiene que tomar una decisión inmediata; si lo sabe, se tienen que tomar dos decisiones inmediatas.

La única manera de que España siga adelante es mediante la profesionalización y la visión a largo plazo de un proyecto empresarial, que nos permita ser más competitivos. Solamente la competitividad será garante de un crecimiento económico. Y esa competitividad comienza teniendo buenos empleados...

viernes, 9 de enero de 2009

ETAPAS EN LA VIDA DE UNA EMPRESA FAMILIAR HASTA LA SEGUNDA GENERACIÓN

Hasta que una compañía vive el proceso de tránsito generacional, ha atravesado por una serie de etapas que son importantes conocer. Existen principalmente tres, con sus correspondientes problemáticas referentes a: la edad de la empresa, del fundador y de los sucesores; la situación de la empresa y su organización; las motivaciones y objetivos del fundador y de la familia; y la situación económica de la familia.

a) Primera etapa: Crecimiento
La empresa surge de la nada y crece muy rápidamente con una estructura y dimensión mínimas. En estos momentos la familia está totalmente implicada en el éxito empresarial, tanto en relación al trabajo como a la situación económica, siendo su compromiso total.

b) Segunda etapa: Maduración
La empresa ya se ha estabilizado y entra en proceso de maduración. Es en este momento cuando se hace necesario crear una estructura sólida y una organización eficaz para poder crecer y consolidarse en el mercado. A nivel familiar, se debe planificar la formación de los sucesores y de transmitirles los valores y la cultura de la empresa familiar.
c) Tercera etapa: Regeneración
Aquí se produce el tránsito de la primera a la segunda generación. Se suelen producir tres características que confluyen en este momento:
- Salida de un líder fundador y entrada de un nuevo líder o grupo de líderes.
- Una estructura envejecida y una empresa, un producto y un mercado maduro.
- Necesidades financieras y de organización derivadas de la urgencia para redefinir estrategias y reorganizar la empresa y su estructura. En esta etapa se ha de planificar y llevar a cabo el proceso de sucesión y de organización de la familia.

En la tabla siguiente se recojen las siguientes situaciones que atraviesa una empresa familiar hasta el momento de tránsito generacional con sus correspondientes problemáticas, según definió Jonh Ward:

Si la empresa familiar sabe distinguir en qué etapa se encuentra, el fundador puede estar más tranquilo para afrontar la sucesión generacional, ya que tendrá mayores posibilidades de éxito. ¡Suerte!